top of page
Buscar
  • Ludwig V. Burkes

Por qué la élite conquistó el mundo: cambio climático.

Actualizado: 21 dic 2021

Ver documental de James Corbett "Why Big Oil Conquered the World: Part II" subtitulado en español ...


Tras repasar el movimiento eugenésico en “Por qué La Élite conquistó el mundo: eutanasia”, James Corbett pasa a analizar el segundo tema importantísimo para entender por qué la élite conquista el mundo: el movimiento medioambientalista con su mantra del cambio climático.


Antes que nada, de cara a posibilitar la asimilación de lo expuesto en este vídeo y en esta entrada, diré que lo que es justo, bueno, recto, lo es independientemente de que sea defendido por algunos hipócritamente y para su medro personal. Si uno está convencido de que el maltrato a los animales es execrable, no debe abandonar sus creencias si descubre que tras la agenda de los derechos de los animales se oculta la intención de limitar los derechos de los humanos, o introducir elementos de discordia entre nosotros para debilitarnos y hacernos más controlables. La limpieza del medioambiente es algo claramente deseable sin importar que la intención de aquellos que quieren imponerla como objetivo principal de la humanidad no sea otra que su debilitamiento y posterior control.


Escribo en esta entrada comentarios que me surgen al visionar el documental. Intento llamar la atención sobre algunas cosas y complementarlas con mi visión y experiencia. Por eso, creo que es conveniente ver el documental antes de leer el texto.


James Corbett empieza esta segunda parte con la presentación de un personaje, casi desconocido para el gran público, clave para entender el movimiento medioambientalista dominante en la política mundial de estos últimos cincuenta años: Maurice Strong.


Como en todo lo concerniente a este relato del asalto al poder absoluto del mundo, no deja de asombrarme la capacidad de ocultar la verdad exponiéndola delante de nuestros ojos, como hacen los prestidigitadores. Si se leen los libros de Gerry Docherty y James MacGregor sobre la 1ª Guerra Mundial(1) , se puede ver cómo los preparativos para la gran guerra contra Alemania se llevaban a cabo casi que a la vista de todos. Sin embargo, el nombre de Alfred Milner es prácticamente desconocido para la gente. Igualmente creo que pasa con Maurice Strong y eso que este buen hombre estaba en todas partes.


En este documental salta a la vista algo a lo que nunca me acostumbraré, que es la cantidad ingente de organismos, institutos, agencias, oficinas, que surgen alrededor de cualquier cuestión ¿De verdad son todos necesarios? Hoy día sé positivamente que la inmensa mayoría de ellos son, en el mejor de los casos, prescindibles, y no pocas veces perniciosos. Indicio de la inutilidad de los mismos es que muchos de ellos están supuestamente dirigidos por las mismas personas, como se ve en este documental con Maurice Strong, y a estas alturas de mi vida, nadie me va a convencer de que existen superhombres con esa capacidad de gestión. Esto se da en todos los niveles de la jerarquía de poder. Cuando vivía en Jimena de la Frontera, un pequeño pueblo del sur de España, conocí a un personaje, Andrés Beffa(2), que figuraba en ocho diferentes organismos. Desde el mismo ayuntamiento del pueblo hasta el consorcio de bomberos de la bahía de Cádiz, si no recuerdo mal. Todo un arte del ordeño, sí señor.


Que todo el movimiento medioambientalista haya sido pergeñado, dirigido y financiado por los oiligarcas es ya de traca. Como siempre, el apellido más frecuente en todo este mundo del cambio climático es Rockefeller. Esto por sí solo debería bastar para poner en guardia a todos los activistas ecologistas, pero no es así. El mundo funciona de maravilla con el esquema dual del bien y el mal claramente diferenciados. Un Dios infinitamente bueno y un Demonio infinitamente malo. Nadie los asocia, a pesar de que Dios debió crear al Demonio y mandar sobre él. Como se ve en este documental, el Dios Ecologismo y el Demonio Petróleo no son antagonistas sino caras distintas de una misma moneda.


James Corbett nos muestra cómo el movimiento eugenésico se transforma en el movimiento ambientalista para dar el gran salto de objetivo: cambiar la diosa “Raza” por la diosa “Tierra”, y pasar de culpar de los males del Universo a los deficientes a culpar a todos los humanos en general. Ya veíamos que si se quiere lograr rebajar la población a un diez por ciento de la actual, finalmente habría que convencer a la gran mayoría de personas de que se auto-sacrificasen. El Cambio Climático es la excusa para ello.


La idea de la superpoblación es una de las más extendidas en el mundo desarrollado. Mucha gente está convencida de que eso es así. Gente que no soporta los ambientes despoblados, que busca afanosamente el bullicio – playas atestadas, grandes festivales, conciertos multitudinarios, etc. – cuando se le pregunta por la superpoblación de la Tierra responden que ésta es una realidad y un gran problema.


En el documental vemos al presidente de la Comisión sobre el Crecimiento de la Población, John D. Rockefeller III, decir: el crecimiento continuado de la población obviamente es insostenible. Éste es un buen ejemplo de “mentir diciendo la verdad”. La frase en sí es incuestionable, salvo por un pequeño detalle: “es” no es la forma verbal apropiada. Debería decir “sería”. Es decir, si dijese “de ocurrir un crecimiento continuado de la población obviamente sería insostenible” nadie se lo podría rebatir, pero ¿Va la población a seguir creciendo sin parar si no se hace nada? Pues según Hans Rosling nada más lejos de la realidad. Creo que todos deberíamos ver alguna de sus conferencias donde nos trata de tranquilizar con respecto a este asunto. Según sus más que razonadas estimaciones, la población del planeta se estabilizará en unos 11.000 millones de personas. Claro que esto le puede parecer a algunos una barbaridad, pero veamos qué significaría. Imaginemos que esos once mil millones de personas viviesen en una única ciudad con la misma densidad de población que el municipio de Sevilla(3). Desde luego no conozco a nadie que se sienta sofocado por la concentración humana en Sevilla. Es una ciudad sin rascacielos. Pues esa megaciudad ocuparía la extensión de media Unión Europea, o la cuarta parte de los Estados Unidos de América. Más de la mitad de Europa, toda Rusia, Asia, África, América (norte, centro y sur), Australia, Oceanía, quedarían absolutamente despobladas. Visto así, y no estoy dando ideas, no parece que el planeta vaya a estar sobrepoblado.



Por cierto que es llamativo que los elitistas, tan preocupados como están por la superpoblación del planeta, parecen sentir una gran inclinación por las familias numerosas. ¿Curioso, verdad?


¿Y qué me dicen acerca de que esa organización tan santa llamada UNESCO fuese fundada por un consagrado eugenesista? Julian Huxley, hermano del autor de “Un Mundo Feliz” (“A Brave New World”). Las pautas para la educación, la investigación y la cultura fueron sentadas por eugenesistas. No es extraño que estemos como estamos ¿verdad?


Huxley escribió en el documento de fundación de la UNESCO:


"Por el momento, es probable que el efecto indirecto de la civilización sea disgénico en lugar de eugenésico; y en cualquier caso parece probable que el peso muerto de la estupidez genética, la debilidad física, la inestabilidad mental y la propensión a las enfermedades, que ya existen en la especie humana, será una carga demasiado pesada para lograr un progreso real. Por lo tanto, aunque es bastante cierto que cualquier política eugenésica radical será durante muchos años política y psicológicamente imposible, será importante que la UNESCO vea que el problema eugenésico sea examinado con el mayor cuidado, y que se informe a la conciencia pública de los problemas en juego, de modo que mucho de lo que ahora es impensable pueda al menos volverse pensable".(4)


A parte del repulsivo lenguaje típico de estos endiosados, estaba claro desde el principio que la misión principal de la UNESCO era convencer de la bondad de la eugenesia a un mundo demasiado tolerante con los “genéticamente estúpidos, inestables mentales y propensos a enfermar”.


Por suerte para nosotros, simples mortales, al 4º Congreso Mundial del Mundo Salvaje en Colorado (4th World Wilderness Congress), organizado por, cómo no, Maurice Strong y con la participación de los Rockefeller, Rothschild, y demás caterva genocida, se apuntó como voluntario un empresario tejano de buen corazón, George Hunt. Este hombre, horrorizado por lo que oía decir allí, tuvo la feliz idea de grabar en cinta magnética el congreso. Esa grabación la pueden escuchar en…



Destaco las palabras de David Lang, un banquero de Montreal que habló durante la conferencia:


Sugiero, por tanto, que esto no se venda a través un proceso democrático. Eso llevaría demasiado tiempo y consumiría demasiado de los fondos para educar a la carne de cañón que, lamentablemente, puebla la tierra. Tenemos que tomar un programa casi elitista, para que podamos ver más allá de nuestro vientre hinchado, y mirar hacia el futuro en marcos temporales y en resultados que no se comprenden fácilmente, o que, con honestidad intelectual, pueden reducirse a algún tipo de definición simplista.”(5)


Si se está bien atento, estas palabras nos revelan mucho más de lo que explícitamente dicen. Los procesos democráticos no son sino costosos mecanismos para vender ideas, no para que el pueblo exprese e implemente sus ideas. El pueblo, esa “carne de cañón que lamentablemente puebla la Tierra”, no tiene nada que decir, solo tragar, y la democracia no es más que esa cuchara de azúcar de Mary Poppins que nos ayuda a engullir las ruedas de molino que se nos ofrecen. Las queramos o no.


La proliferación de organismos y eventos hace prácticamente imposible tener conciencia de qué va todo esto. Muchas siglas con rimbombantes significados, mucho osito panda, mucha espiguita de trigo, todo muy edulcorado y profesional como para dudar de las buenas intenciones de sus promotores.


Si seguimos la evolución de estos organismos y encuentros veremos que poco a poco pero con determinación estaban avocados a la conclusión final necesaria para implementar la agenda genocida de despoblación mundial: el cambio climático.


La complejidad de los organismos nos impide apreciar cómo funcionan realmente, cuáles son sus verdaderos objetivos. El IPCC, el Panel Internacional para el Cambio Climático, se constituyó de manera que solo podía concluir una cosa: la humanidad es el cáncer de la Tierra. Lamentablemente el documental The IPCC Exposed ha sido eliminado, como tantos y tantos, de Youtube, pero de los extractos que nos muestra James Corbett, extraemos un hecho muy importante: el cambio de definición de los términos que normalmente usamos. Seguramente será consciente de que la OMS ha ido cambiando el concepto de pandemia para facilitar todo esta paranoia en la vivimos. Maurice Strong, una vez más, cambió la definición de causa de cambio climático para que solo incluyese las acciones humanas. Este subterfugio excluye la cualquier posibilidad de causa natural del cambio climático y, por lo tanto, garantiza la condena del ser humano.


Cuando yo era un niño, en el mundo cristiano, todos nos sabíamos los Diez Mandamientos de Dios, que podían verse como la Gran Constitución del Mundo. Jonathan Swift, el autor de “Los Viajes de Gulliver”, decía que las leyes debían de tener a lo sumo dos líneas, y creo que no estaba falto de razón. Pero desde luego, las constituciones deben ser lacónicas, más parecidas a los Diez Mandamientos que a lo que tenemos. Pero esto no encaja bien con las ansias de dominación de las élites de todos los tiempos. “No matarás” está claro lo que significa. Los anarco-libertarios complicamos algo la cosa y decimos “No matarás salvo en defensa propia”, que sigue estando claro. Pero esto excluye a la guerra, que es la principal herramienta de expansión e intensificación del poder. Las élites necesitaban acabar con los códigos religiosos e implantar el suyo propio, y así parieron “La Carta de la Tierra”. Apuesto que casi nadie sabe lo que dice pero todos pensamos que debe ser maravillosa. Ese tipo de textos que le llevan a tipos como a Rodríguez Zapatero decir que “la Tierra pertenece al viento”. Esta ridícula frase no es inocente, y cuando veamos el capítulo dedicado al desarrollo sostenible se entenderá por qué.


Así que del “eliminar a los débiles mentales” se pasó gradualmente a través del cambio climático al “la humanidad es un cáncer que hay que extirpar”, y para ello, nada como culpar del desastre medioambiental a un elemento que es esencial para la vida: el dióxido de carbono.


La reducción del dióxido de carbono lleva implícita la reducción de la población, puesto que la vida es un continuo producir CO2.


Es nauseabundo escuchar a gentuza como David Rothschild, el Príncipe Carlos, y compañía acusarnos de destruir el planeta con nuestras lujosas y derrochadoras vidas. Tenemos que apretarnos el cinturón aún más, dicen. De momento podríamos empezar por eliminarlos a todos ellos. Sin duda la huella de carbono se reduciría apreciablemente.


Espero que ya vaya quedando claro con qué calaña estamos tratando, pero todavía queda mucha tela que cortar. Ojalá que cuando termine esta selección de documentales del bueno de James Corbett, usted esté convencido, como yo lo estoy, de que este mundo necesita un cambio a fondo en el que no tengan cabida las estructuras e instituciones de la antigua normalidad, aparentemente aun en vigor. Tratar de curar una vieja dolencia con los remedios ya fracasados sería una solemne estupidez.


(1) “Hidden History: The Secret Origins of the First World War” y “Prolonging the Agony: How the Anglo-American Establishment Deliberately Extended WWI by Three-And-A-Half Years.”


(2) Vean como muestra de lo que digo este titular del Diario de Cádiz: “Declaran de nuevo los investigados por presunto fraude en el Consorcio de Bomberos


(3) Téngase en cuenta que estoy considerando el Municipio, no la ciudad, por lo que esa megaciudad tendría sus zonas no urbanizadas también.


(4) "At the moment, it is probable that the indirect effect of civilisation is dysgenic instead of eugenic; and in any case it seems likely that the dead weight of genetic stupidity, physical weakness, mental instability, and disease-proneness, which already exist in the human species, will prove too great a burden for real progress to be achieved. Thus even though it is quite true that any radical eugenic policy will be for many years politically and psychologically impossible, it will be important for UNESCO to see that the eugenic problem is examined with the greatest care, and that the public mind is informed of the issues at stake so that much that now is unthinkable may at least become thinkable."


(5) “I suggest therefore that this be sold not through a democratic process. That would take too long and devour far too much of the funds to educate the cannon fodder, unfortunately, that populates the earth. We have to take almost an elitist program, [so] that we can see beyond our swollen bellies, and look to the future in time frames and in results which are not easily understood, or which can be, with intellectual honesty, be reduced down to some kind of simplistic definition.”

97 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

El teatro macabro de los bandos enfrentados.

¡Qué lejos me parecen aquellos tiempos en los que creía que vivíamos en el mejor de los mundos posibles! ¡Y pensar que yo ridiculizaba a aquellos que veían conspiraciones por todas partes! Lo ridículo

Publicar: Blog2_Post
bottom of page